Es de larga data la discusión si la literatura debe estar comprometida con la realidad cotidiana o permanecer en el limbo.
Creo que cada escritor debe adoptar la posición en que crea.
Si Vargas Llosa es de posicionamientos liberales allá él.
Que en muchas de sus obras aprovecha de sus personajes para denigrar lo argentino es cierto. Tengo en mi biblioteca todas sus obras (salvo la última) publicadas por Alfaguara y patrocinada por Clarín; por lo tanto sé de lo que hablo.
No comparto su ideología.
Pero no debemos silenciarlo. Seamos pluralistas. pues si no nos convertimos en aquello que criticamos.
Se equivocan, repito, algunos de nuestros más conocidos escritores y filósofos.
Bien y rápida la presidenta al ponerle freno a una estupidez.
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